No sé de donde has venido, como has llegado, pero ahí estás, instalada en mi cabeza. No sé como eres, solo te escucho. Miro la tele y no veo nada solo estás tú, tengo miedo a perderte y también a que te quedes para siempre.
Creo que ahora estoy más loco, pero todavía no se nota, con los años he aprendido a "disimularme", aunque creo que mis ojos me siguen engañando.
Ahora sí me siento solo, nadie me ayuda, nadie puede ayudarme, esta vez sí es mi batalla y aunque sea solo en sueños he de ganarla...
Algún día serás mía, y cuando llegue ese día jamás escaparás de mi.
jueves, 25 de noviembre de 2010
miércoles, 10 de noviembre de 2010
Suscribirse a:
Entradas (Atom)